Deliciosa receta de nuestro compañero Tente Tellols Ortiz, para disfrutar de las bondades de un plato al horno, con uno de los cortes cárnicos menos nobles del jabalí y más sabrosos. Esta receta de costillas de jabalí al horno será parte de tu recetario.
Costillas de jabalí al horno
Ingredientes:
Para el marinado de la carne
- Vino blanco (vaso y medio)
- Media cabeza de ajos pelados
- Un buen chorro de aceite de oliva
- La misma cantidad o algo menos de vinagre
- Sal
- Hierbas provenzales (Puedes adquirir esta mezcla en bote o hacer tu propia mezcla, con tomillo, orégano, romero, mejorana, albahaca, y otras como los brotes del hinojo, perifollo, estragón y laurel, a tu gusto)
- Seis bolitas de pimienta negra
- Una cebolla
- Un pimiento rojo.
- Una cucharadita de maicena
Elaboración:
Comenzamos poniendo a marinar la costilla de jabalí en el siguiente marinado:
Vino blanco, ajos pelados, un chorro de aceite de oliva, un corro de vinagre, sal.
Lo trituramos todo y le añadimos las hierbas provenzales, pimienta negra. Cortamos la cebolla y el pimiento rojo y se lo añadimos. en un bol o fuente que podamos introducir en el frigorífico, cubrimos la costilla con este marinado y lo dejamos en la nevera 24 horas, tapado con papel film.
Pasado este tiempo ( puedes dejarlo unas horas más, sin problema) Sacamos las costillas del marinado, escurrimos y separamos las verduras del caldo. Reservamos las verduras aparte. Y usamos para nuestro asado el líquido de la marinada.
Pre-calentamos unos minutos antes, el horno a 200º C. e introducimos la bandeja, con la costilla de jabalí junto con el caldo del marinado, vamos dándole vueltas, cada rato, nuestro compañero nos cuenta que este asado estuvo sobre 1 hora y 45 minutos. Mientras se cocina en el horno nuestras costillas de jabalí, salteamos las verduras del marinado en una sartén, con un chorrito de aceite de oliva, añadiendo más verduras si nos parece oportuno.
Para finalizar y montar nuestro plato, sacamos las costillas ya asadas y reservamos.
Para la salsa, retiramos a un cazo todo el liquido de la fuente de asado, ponemos a hervir y añadimos una cucharadita de maicena diluida en un poco de agua fría, que nos ayudará a espesar nuestra salsa. Removiendo sin parar hasta conseguir una textura cremosa, ni líquida ni excesivamente espesa.
A la hora de emplatar, pondremos uno o dos trozos de costillas, con las verduritas salteadas y salsa al gusto.
Plato en el que hay que incluir un buen pan…
Refrán Castellonés
«Qui no guarda cuan té, no menja cuan vol»
«Quién no guarda cuando tiene, no come cuando quiere»
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