Esta receta es tan versátil como fácil y muy rica en boca. Las opciones son tantas como tu imaginación te marque. Que no tienes setas silvestres, cambias el relleno. Que no te apañas para rebozar el espárrago en entero, pues te ayudas de una loncha de jamón york a modo de sabanita para poder enrollar, rebozado o sin rebozar, queda siempre de lujo.
Te cuento mi receta y espero que saques al chef que llevas dentro…
Espárragos rellenos con rebozuelos y nueces, rebozados con harina de castaña
- Un bote de espárragos más bien gorditos
Para el relleno:
- harina
- leche
- aceite de oliva
- tres dientes de ajo
- nuez moscada
- un puñado de setas silvestres. ( Cantharellus cibarius «rebozuelos»)
- un puñado de nueces ( peladas y troceadas)
- harina de castaña ( opcional para el rebozado)
- dos huevos enteros
- pan rallado
- sal y pimienta negra
Elaboración:
Comenzamos haciendo una bechamel, en una cazuela, añadimos dos cucharas de aceite de oliva y calentamos. Lavamos y cortamos las setas en trozos pequeños, cortamos en cuadraditos pequeños un diente de ajo y se lo añadimos a la cazuela, dejamos las setas rehogando hasta que no suelten nada de líquido y añadimos dos cucharas colmadas de harina que cocinaremos bien, hasta que no se vea ni rastro de la harina.
En este momento echaremos la leche ( entera, desnatada o semi desnatada, la que utilices en casa) sin dejar de remover para que no nos salgan grumos y se vaya cocinando nuestra bechamel. Ve poniendo leche de poco en poco, y ralla un poco de nuez moscada, añadimos las nueces, ligeramente troceadas. Cocina el conjunto unos diez minutos aproximadamente, o hasta que nuestra bechamel esté hecha como si fueras a hacer croquetas. Reservamos.
Escurrimos los espárragos (mejor si son gorditos) cortamos a la mitad, procurando no dañar las yemas.